# CUENTO DE INTERNAUTAS#
Nuestros dedos machacan ágilmente las teclas mientras nuestros ojos se sumergen en el horizonte limitado de diecisiete pulgadas que tenemos al frente. Los caracteres prediseñados en Times New Roman que aparecen como por arte de magia para responder nuestras palabras, desfilan como presurosas hormigas electrónicas y eso lo traduce nuestro cerebro para degustar al instante un saludo, un elogio o una broma. Nuestro rostro está impasible mientras es bañado con los tonos azulosos de la pantalla. Allí, a miles de kilómetros de distancia se encuentran nuestras amigas/os y desearíamos estar junto a ellos
disfrutando de su cordialidad que sólo se traduce en palabras hiladas y apostrofadas a propósito, de sus risas que sólo son un simple jajajajajaja dibujado en rítmica cadencia y de sus voces desconocidas e imposibles de imaginar. Nos pasamos atisbando ese firmamento vítreo para sentir un cosquilleo en su corazón cuando un mensaje aparece en el costado inferior derecho de la pantalla explicándole que fulano de tal ha iniciado la sesión. Cada noche sueña con rostros hipotéticos que le hablan con acentos oníricos, 
viviendo realidades absurdas en una argamasa informe de acontecimientos difusos. Poco recuerda de esos sueños pero nos importa, sabemos que son nuestras amigas/os quienes nos vienen a visitar y a contarnos sus cuitas y a veces despertamos alborozadas,y en cuanto tenemos unos minutos libres corremos al computador, lo enciendemos y emprendemos nuestro cotidiano viaje por los códigos precisos de la red....para encontrar a nuestros amigos/as lejanos pero muy queridos....Eva
